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Procesos Políticos

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Oscar Pineda

Corrupción en el sindicato…

Los sindicatos en México son como el chupacabras, chupan la sangre a sus agremiados y a la hora que se les busca o se les necesita nadie los encuentra.

Para botón de muestra está el sindicato de los trabajadores de la Salud de Tamaulipas, que nada más hace ruido cuando le conviene a su dirigente pero callan ante las verdaderas injusticias que enfrentan los trabajadores.

Es lamentable que a ningún dirigente sindical le haya molestado tanto la imagen de sus compañeros formados para recibir un triste bono, que, dicho sea de paso, ni siquiera les hicieron válido para todas sus compras.

Y es que lamentablemente en la defensa de las verdaderas causas no hay negocio, al menos no como el que hay en la exigencia de plazas, para eso si se pintan solos los líderes sindicales.

Otro claro ejemplo es el Sindicato de Maestros y las asociaciones de jubilados, quienes guardaron silencio ante la desafortunada fotografía de las largas filas que tuvieron que hacer los maestros retirados para cobrar su bono.

A nadie en el SNTE le molestó ver a los maestros jubilados, esos que dejaron sus mejores años frente a las aulas, formados a la intemperie como si fueran a pedir limosna.

Nadie saltó, nadie protestó por el trato indigno que les dieron a quienes formaron generaciones de buenos ciudadanos.

¿Le seguimos?…  Otro ejemplo es el sindicato del Ayuntamiento de Victoria, que hasta ahora no se ha preocupado por proteger a los adultos mayores que trabajan en la limpieza de las calles.

Son población vulnerable y ahí andan todos los días, cumpliendo con su deber, cuando deberían estar en casa resguardados y con todos los apoyos necesarios para que no batallen.

A este sindicato tampoco le preocupa ver a sus trabajadores exponiéndose cada quincena a los contagios del Covid, haciendo fila afuera de la tesorería municipal para cobrar sus salarios.

¿Qué me dice del sindicato de la construcción? Miles de trabajadores de este ramo se encuentran desempleados o han tenido que migrar para poder asegurar el sustento de sus familias y no hay quien abogue por ellos.

Del sindicato de las maquiladoras mejor ni hablamos. Toda la vida se han hecho de la vista gorda para no ver los atropellos laborales de que son víctimas sus compañeros.

Eso sí, los líderes sindicales, del ramo que usted me diga, se dan vida de lujo, son dueños de infinidad de propiedades, vehículos y servicios que no podrían pagar si no fuera a costa del sacrificio de los trabajadores.

Tristemente los sindicatos se volvieron cómplices de algunos malos patrones y por eso sirven para dos cosas como dirían los viejos de mi rancho: para nada y para nada.

EL PERSONAJE

Otro buen hombre que perdió la batalla contra el Covid fue el doctor Serapio Cantú, ex alcalde de Reynosa y conocido en su tierra como El Doctor de los pobres, porque daba consulta a los más necesitados sin cobrarles un solo peso.

El Doctor Serapio atendió a varios pacientes con Covid hasta contraer el virus. Algunos de los enfermos que atendió eran, como él, buenas personas, dedicadas a trabajar y a servir, uno de ellos Vicente de Andar “La Cotorra”, quien también perdió la pelea.

Descanse en paz el Doctor Serapio Cantú.

POSDATA…

La crisis económica ha impactado hasta en las asociaciones religiosas. Los ingresos de las Iglesias por donativos, diesmos y aportaciones de los fieles se redujeron, en algunos casos a cero pesos.

Facebook @oscarpineda78

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