Don Cacahuato, el gran proveedor de Jaime Bonilla
Tal como lo hiciera Marina del Pilar Ávila Olmeda, el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez entregó contratos millonarios a la empresa Comercializadora Doncacahuato, S. de R. L. a la que le pagó más de 600 millones de pesos para la compra de despensas y desayunos escolares, incluso pese a la pandemia
* Este reportaje es parte del Hub de Periodismo de Investigación de la Frontera Norte, un proyecto del International Center for Journalists en alianza con el Border Center for Journalists and Bloggers
Por Cristian Torres Cruz / RadarBC
El gobierno del Estado, encabezado por Jaime Bonilla Valdez, entregó a la empresa Comercializadora Doncacahuato, S. de R. L. más de 600 millones de pesos en 4 contratos para la adquisición de despensas y desayunos escolares, siendo en todos los procesos de adquisición la única empresa participante.
En total, las dependencias DIF Estatal y la Secretaría de Integración y Bienestar Social (SIBS) licitaron por estos dos conceptos en siete ocasiones: en los cuatro más grandes resultó ganador Doncacahuato, una más que resultó desierta y dos que en conjunto “apenas” superaron los 50 millones de pesos, y de estas últimas solo en una de ellas participaron tres empresas.
Al igual que el gobierno de Jaime Bonilla Valdez, Marina del Pilar Ávila Olmeda, gobernadora electa, entregó a Doncacahuato las únicas cuatro licitaciones del DIF municipal para la compra de despensas y cobertores durante el 2020 y 2021. La administración de Ávila Olmeda pagó 34 millones a esta empresa, monto relativamente pequeño si se compara con lo entregado por Bonilla, que supera los 600 millones de pesos.
En el caso de Ávila Olmeda, Guadalupe Mora Quiñonez, su suplente que asumió el cargo cuando la exalcaldesa buscó la candidatura a la gubernatura, dio a conocer públicamente que la empresa infló el precio de los productos.
Despensas entregadas durante la Pandemia de COVID-19 por parte de gobierno del estado de Baja California. Créditos: Cristian Torres
De igual manera se documentó la mala calidad de los productos y las porciones sumamente escasas, pese a que el precio unitario incrementó de una licitación a otra de 140 a 170 pesos por los mismos productos, con diferencia de meses entre licitación y licitación.
Las licitaciones
Durante el 2020, la empresa Doncacahuato ganó dos licitaciones en el Gobierno de Jaime Bonilla Valdez, la primera mediante Oficialía Mayor, pero solicitada por el DIF Estatal. Ésta fue publicada el 19 de marzo con el número OM-DIF-063-2020, por 77 millones 730 mil 120 pesos más un IVA del 16 por ciento, por lo que el costo final estimado fue de 90 millones de pesos para la adquisición de desayunos escolares beneficiando a 49,827 niños en 294 escuelas, dando un precio unitario de poco más de 30 pesos por platillo.
En el fallo de la licitación no estuvieron ni el Oficial Mayor ni el Secretario de Hacienda, por lo que firmaron sus suplentes. Por parte de la empresa firmó el representante Gilberto Alemán Luna.
Cabe destacar que, según el Registro Público del Comercio, la empresa cambió el objeto de la sociedad apenas el 23 de enero del 2020, bajo el Folio mercantil electrónico 29860, en el cual se agregó “EQUIPAMIENTO E INSTALACIÓN DE COCINAS Y PREPARACIÓN DE ALIMENTOS”. Técnicamente “adivinó” la licitación que se hizo pública dos meses después del cambio de giro comercial.
La segunda licitación que ganó durante ese año fue la OM-DIF-078-2020 publicada el 31 de marzo, apenas 12 días después de que se publicara la primera y dos días antes del fallo.
En esta ocasión, la licitación fue por un monto de 119 millones 796 mil 100 pesos, siendo los mismos firmantes quienes participaron en el fallo.
Durante el 2021, Doncacahuato volvió a ganar dos licitaciones, sin duda, las más importantes por el monto que representaron. La primera fue publicada el 15 de enero para el suministro de 635 mil despensas, la cual corrió a cargo del Oficialía Mayor, en favor de la Secretaría de Inclusión y Bienestar Social.
Con el número 32065001-002-2021 la empresa ganó el contrato por 200 millones de pesos, sin la necesidad de competir contra otra empresa, incluso se dio el lujo de no acudir a la reunión del Comité de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios de Oficialía Mayor, en la que se dio el fallo ganador.
El siguiente contrato OM-DIF-033-2021 fue publicado el 12 de febrero, otorgando el fallo el 26 del mismo mes a favor, nuevamente, de la comercializadora Doncacahuato, bajo el concepto de “Suministro de despensas para el DIF de Baja California”.
Sin embargo, el acta circunstanciada en la que se hace constar el fallo celebrado por el Comité de Adquisiciones señala que la propuesta económica ganadora fue por 224 millones 200 mil 266 pesos más IVA, a la tasa del 8 por ciento “SOLO DEL SERVICIO POR LA PREPARACIÓN DE DESAYUNOS ESCOLARES”.
En el Anexo F se hace mención de las 294 escuelas beneficiadas, por lo que se puede inferir que se trata de desayunos escolares, los cuales fueron programados y licitados en febrero de este año cuando las clases se encontraban suspendidas por la pandemia de COVID-19 y no se tenía una fecha en la que pudieran regresar.
“No se estarán dando desayunos porque no hay condiciones para hacerlo, definitivamente no es posible hasta que no tengamos una situación regularizada”, expuso Hildelisa Limón Sánchez, encargada de despacho de la delegación del Sistema Educativo Estatal, en el marco de un informe de actividades realizado en octubre del 2021.
También cobertores
La empresa Comercializadora Doncacahuato no solo vende despensas y desayunos escolares, también vende cobertores, esto según contratos de adjudicación directa realizados por el DIF Estatal BC-DIF-MXL-ADJ-RP-20-06y el BC-DIF-MXL-ADJ-RP-20-07 ambos por 400 mil pesos.
Doncacahuato Sociedad de Responsabilidad Limitada
Doncacahuato S. de R. L. fue creada el 6 de julio del 2015 en el municipio de Chihuahua, desde entonces Diconsa y los DIF municipales y estatales han sido su gran negocio.
La empresa presume entre sus clientes a los gobiernos de Chihuahua, Oaxaca, Colima, Veracruz, Nuevo León, Coahuila y a los ayuntamientos de Monterrey, Veracruz y Saltillo.
La empresa surgió principalmente como comercializadora de dulces, fruta deshidratada, latas de comida y artículos de oficina, sin embargo, después de dos modificaciones al giro comercial dadas de alta en el Registro Público del Comercio, agregó primero la compra al por mayor de alimentos y en la segunda modificación la posibilidad de preparar alimentos.
La empresa fue constituida por Teodoro Martínez Ramos y su hijo Teodoro Octavio Martínez Ruiz,. El padre es dueño de al menos 14 empresas, entre ellas Cimarrón Nuts, Cimarrón Industrial, Cimarrón Chocolates y dulces, Productora Cimarrón, entre otras, la mayoría de ellas asociadas con Octavio y que son proveedoras de suministros a Doncacahuato.
Según registros del portal QuienEsQuien actualizados hasta el 2019, de 2017 a 2019 la empresa logró 86 contratos como proveedor de entidades de gobierno, generando recursos por 439.6 millones de pesos, de los cuales, 81 millones fueron por adquisición directa.
Solo cuatro los ganó por licitación pública, pero fueron en 2017, los más antiguos.
Cabe resaltar que de esos 86 contratos generó ganancias por 439.6 millones de pesos, mientras que con Jaime Bonilla generó más de 600 millones en sólo cuatro contratos.
Otras licitaciones
Del total de licitaciones realizadas por el DIF y SIBS para la entrega de despensas y desayunos, sólo en dos no participó la empresa de los Teodoro Martínez. El 29 de enero del 2021 se publicó la licitación 32065001-003-2021en la que la empresa AB Alimentos Nutraseuticos Funcionales S.A. de C.V. resultó ganadora para la contratación de “Servicio para la preparación de desayunos comunitarios para la Secretaría de Integración y Bienestar Social”, por un monto de 26 millones de pesos más IVA.
A pesar de la pandemia y la determinación del Sistema Educativo Estatal de señalar que no existían condiciones para entregar alimentos preparados en las escuelas, la licitación se realizó sin contratiempo.
Apenas el 27 de diciembre del 2019, la empresa ganó por adjudicación directa la licitación DAD-ADQ-SIBSO-125-19 para el suministro de alimentos para niños y niñas pertenecientes al Sistema Educativo Estatal.
Incluso durante el inicio de la administración estatal fue cuestionada ya que el mismo gobernador Jaime Bonilla había señalado que parte del proceso de adjudicación se llevó a cabo antes de que tomara protesta en el cargo el 1 de noviembre del 2019.
Además, la empresa propiedad de Mario Abeyta Ruiz apoyó abiertamente a la candidatura morenista de Célida López Cárdenas en Hermosillo, Sonora, y una vez electa lo nombró dentro de un comité para seleccionar a los integrantes de su gabinete.
La empresa fue ligada a funcionarios cercanos a la Secretaría General de Gobierno, sin embargo, esto no se pudo comprobar y el tema murió luego de que se cancelaran las clases derivado de la pandemia de COVID-19.
Sólo en la licitación 32065001-001-2020 para el suministro de despensas para la Secretaría de Integración y Bienestar Social participaron tres empresas, Granos y Semillas de México S.A. de C.V., LG Comercial de Baja California S.A. de C.V. y Agroproductos Selectos la Mesa S.A. de C.V. Esta última siendo la ganadora por un importe de 32 millones de pesos, nuevamente insignificante al compararse con las asignadas a Doncacahuato.
Opacidad en el gobierno de Bonilla
Derivado de la presentación de resultados del Censo Nacional de Gobiernos Estatales 2021, publicado el pasado 1 de septiembre, Baja California fue la cuarta entidad más opaca al contratar el 44.4 por ciento de todas sus compras por Adjudicación Directa.
Según las mismas estadísticas, sólo en el 1.9 por ciento de las licitaciones se hicieron por invitación a cuando menos tres personas o a través de invitación restringida.
El gobierno de Jaime Bonilla licitó de manera pública nacional el 22.2 por ciento, sólo por arriba de San Luis Potosí, que utilizó este proceso solo en 2 por ciento de sus compras, Chiapas con el 13.8 y Campeche con el 17.8 por ciento.
Del total del monto asociado a los contratos realizados en 2020 por la administración estatal, que fue de 3 mil 952 millones de pesos, mil 756 millones se entregaron por adjudicación directa, mil 131 millones bajo el concepto de otros y sólo se licitaron de manera pública nacional 876 millones de pesos.
Vicenta Espinoza, titular de la Secretaría de la Honestidad y Función Pública, justificó la falta de licitaciones públicas asegurando que llegaron al gobierno cuando la administración pasada los dejó sin presupuesto.
“Tuvimos que echar mano de lo que teníamos y de lo que se podía, entonces no había mucho recurso para hacer licitaciones y muchas de las compras lo que se hizo fueron adjudicaciones directas porque los montos así lo requerían”, expuso.
Dijo que Baja California es de las entidades más castigadas por la lejanía, mientras que a nivel central siempre tienen mayor recurso.
Por su parte, Adalberto González Higuera, Secretario de Hacienda de Baja California, compareció ante el Congreso del Estado como parte de la glosa derivada del segundo informe de gobierno de Bonilla Valdez.
Ante diputados y bajo promesa de decir la verdad, afirmó que en cuanto al tema de licitaciones el 63 por ciento fueron por adquisición directa o invitación y sólo el 37 por ciento fue licitación al cierre de la administración.
El funcionario presentó una tabla en la que señaló que del total de 278 licitaciones públicas, 82 fueron del sector central y 196 de las paraestatales.
De invitaciones a cuando menos tres proveedores el gobierno central utilizó este procedimiento en 51 ocasiones, mientras que las paraestatales lo utilizaron en 60 ocasiones.
Finalmente, en adjudicación directa por excepción, el gobierno central la utilizó en 115 ocasiones, mientras que las paraestatales en 118. En total fueron 233, siendo la favorita del sector central, convirtiéndo la excepción en la regla durante la administración.
“No estoy de acuerdo en eso”
En entrevista con Bonilla Valdez se le cuestionó al gobernador sobre la opacidad en los datos y se le requirió una opinión respecto al hecho de que sólo se licitó el 37 por ciento de todas las compras de gobierno.
“No estoy de acuerdo en eso, me tendrías que decir cuáles son las licitaciones porque son miles de licitaciones, cientos, pueden ser cubrebocas, depende de la situación, no sé de qué estás hablando en lo particular, generalizas mucho”, expuso.
-Es dato es general
“Si así lo preguntas yo te digo que ninguna”, dijo molesto el gobernador.
Cuando se le preguntó por el tema de las despensas, el gobernador se negó a contestar la pregunta e inmediatamente se retiró de la oficina en donde se realizaba la entrevista.
* Este reportaje es parte del Hub de Periodismo de Investigación de la Frontera Norte, un proyecto del International Center for Journalists en alianza con el Border Center for Journalists and Bloggers.