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Restauración del Centro Universitario de la Salud en Tijuana costó 81.76% más

Restauración del Centro Universitario de la Salud en Tijuana costó 81.76% más  

La Universidad Autónoma de Baja California (UABC) registró un sobrecosto del 81.76 por ciento en el proyecto de remodelación y equipamiento del Centro Universitario de Educación de la Salud (CUES), el cual inició operaciones aún en obra negra y sigue generando gasto para la compra de equipo, de acuerdo con los contratos obtenidos por transparencia y entrevistas a funcionarios. 

Este reportaje es parte del Hub de Periodismo de Investigación de la Frontera Norte, un proyecto del International Center for Journalists en alianza con el Border Center for Journalists and Bloggers.

Manuel Ayala

Tijuana.- Aunque originalmente la inversión anunciada para la remodelación y equipamiento del Centro Universitario de Educación de la Salud (CUES) Campus Tijuana era de 120 millones, la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) ha pagado 81.76 por ciento más y el proyecto sigue inconcluso, de acuerdo con contratos de obra obtenidos a través de la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) y de información proporcionada por el área de Comunicación Social de la institución.

Octavio Valdez Delgadillo, ex rector de la Universidad, indicó el pasado 8 de febrero de 2021, a través de una transmisión en vivo en la página de Facebook del gobernador morenista Jaime Bonilla Valdez, que el presupuesto requerido para esa obra sería de 120 millones 855 mil 741 pesos.


Captura de pantalla de la transmisión que se realizó el 8 de febrero donde se observa al ex rector Octavio Valdez presentando el proyecto de remodelación y equipamiento del CUES Campus Tijuana. 

No obstante, un análisis hecho a los contratos otorgados a tres empresas distintas y proporcionados vía transparencia, indica que entre 2021 y 2022 la Universidad ha pagado 219 millones 669 mil 724 pesos, es decir, 98 millones 813 mil 983 pesos más de lo proyectado.

La construcción se realizó con el recurso económico de un adeudo histórico que tenía el Gobierno del Estado con la UABC por mil 797 millones de pesos y que ya liquidó, según informó el ex mandatario estatal Jaime Bonilla en la misma transmisión del 8 de febrero de 2021. 

La UABC es una institución ubicada en la frontera del país. De acuerdo con su Sistema de Indicadores y Estadísticas Institucionales, tiene más de 68 mil matriculados en licenciatura, maestría y doctorado, en tres campus universitarios en Mexicali, Ensenada y Tijuana. 

La Universidad opera con un subsidio anual que está integrado por un 35.31 por ciento de aporte federal, 34.02 por ciento del estado, 19.36 por ciento con ingresos propios y 10.70 por ciento de ejercicios fiscales anteriores, según el presupuesto 2022. 

Luis Enrique Palafox Maestre, actual rector de la UABC, accedió a una entrevista vía correo electrónico a través del Departamento de Comunicación de la institución el 27 de mayo del presente año, acordando el envío de un cuestionario escrito, el cual fue respondido por ese medio.

Palafox Maestre reconoció que hubo un sobrecosto en el proyecto planteado originalmente y lo atribuyó a distintos factores como lo son: la creación de un tercer nivel que significó un incremento del 50 por ciento, además de otras adecuaciones como salidas de emergencia por recomendación de Protección Civil, la renovación de las instalaciones eléctricas, de aire acondicionado, red de voz y datos, internet, así como equipamiento para las áreas de laboratorios y la biblioteca. 

Aunado a esto señaló que la pandemia generó un incremento generalizado en los costos de construcción y esto impactó en el gasto final. 

“Hay que tomar en cuenta que este y todos los proyectos se han visto afectados por una fuerte ola de incrementos en costos de materiales, equipo y mano de obra a consecuencia de la pandemia de covid-19 y el desabasto que se ha venido viviendo a la fecha”, expuso.

Fachada del Centro Universitario de Educación de la Salud (CUES) en Tijuana, edificio que anteriormente fungía como una extensión del Centro de Gobierno de Baja California. Foto: Joebeth Terríquez

El CUES era sede del Centro de Gobierno del Estado de Baja California y fue donado a la Universidad en el año 2021. El edificio se encuentra en la Zona Río de Tijuana. 

Al CUES acuden los alumnos interesados en el área médica de la Facultad de Ciencias de la Salud y de la Facultad de Medicina, además de Enfermería y Cirujano Dentista de la Facultad de Ciencias de la Salud, quienes cursan sus estudios solamente un año (primero y segundo semestre), correspondiente a la primera etapa de formación.

A partir del tercer semestre, los alumnos continúan su formación en los campus correspondientes a las facultades que pertenecen; únicamente los de la Facultad de Odontología cursan tres semestres, que es la totalidad de la etapa básica.

Aún con la inversión mayor a lo estipulado, el proyecto sigue inconcluso para este 2023, pues tiene un presupuesto adicional en equipamiento para laboratorios de 17 millones de pesos, de los cuales 13 millones serán con recurso propio y cuatro millones del Gobierno del Estado, informó el departamento de Comunicación Social de la institución.

Los contratos obtenidos por transparencia detallan que las obras comenzaron en junio de 2021. 


Verónica González Torres, Jefa Académica del Centro Universitario de Educación en la Salud (CUES), durante la entrevista que se le realizó el 1 de junio de 2023. Foto: Joebeth Terríquez

Verónica González Torres, jefa académica del CUES, confirmó en entrevista que el arranque de las actividades en este inmueble no se dio con la totalidad de los alumnos, ni con las instalaciones completas en cuanto a la remodelación e infraestructura, sino que ambas cosas fueron progresivas. 

“La transición fue paulatina, los espacios no eran los idóneos para poder atender de manera inmediata a los alumnos (…) Sí, fuimos un poquito más lentos en ese proceso porque debíamos tener en consideración cómo iba avanzando la remodelación para asegurarnos de que iban a ser espacios que pudieran cubrir las necesidades de nuestros alumnos, pero sobre todo, que iban a garantizarnos las medidas de seguridad necesarias”, manifestó.

Describió que mientras las actividades escolares eran en línea arrancaron con los procesos de remodelación del inmueble y en el 2022 comenzaron a migrar a la modalidad presencial.

Mencionó que las clases en el CUES iniciaron el 9 de agosto de 2021, bajo la modalidad en línea, debido a la pandemia por Covid-19, por lo que no había trabajos presenciales por cuestiones de salud; “arrancamos el primer semestre con 21 grupos, actualmente tenemos 48”.

El historial de contratos 

La remodelación del CUES, según la Plataforma Nacional de Transparencia, fue a través de seis contratos firmados por la UABC con tres empresas distintas por un total de 217 millones 683 mil 666 pesos. 

Esta cifra que consta en los contratos es menor al recurso ejercido reportado por la Universidad que fue de 219 millones 669 mil 724 pesos, una diferencia de un millón 986 mil 58 pesos. La dependencia no informó a qué se debió esta diferencia entre lo contratado y lo ejercido.

Una de las empresas, Frontera Mexicali, fue creada un año antes de iniciar el gobierno de Jaime Bonilla en 2018, de acuerdo con información obtenida a través del Registro Público de Comercio (RPC).

Frontera Mexicali S. de R.L. recibió dos contratos por 24 millones 623 mil 341 pesos, para la “primera etapa cuarto de máquinas” y “segunda etapa cuarto de máquinas”. La empresa obtuvo su registro el día 20 de febrero de 2018 a nombre de Marissa Villalobos Pacheco y Daniela Salazar Galaviz.

La empresa RP Constructores S.A. de C.V. recibió un contrato por un millón 72 mil 139 pesos, para los “Preliminares primera etapa de remodelación”. La constitución de la empresa fue el 20 de septiembre de 2011 a nombre de José María Pollorena Sandoval y Pedro Rodríguez Domínguez.

Mientras que RJ Ingeniería S.A. de C.V recibió tres contratos por 191 millones 988 mil 184 pesos para la “primera etapa de remodelación”, “segunda etapa de remodelación” y “tercera etapa de remodelación”. Ésta fue registrada el 3 de enero de 2014 a nombre de Francisco Jiménez Olivares y Jesús Octavio Rincón Vargas. 

Jaime Bonilla, ex gobernador,  entregó las llaves del inmueble al ex rector en un acto protocolario el pasado 18 de marzo de 2021, en donde informó que el edificio iba a ser donado a la UABC. El acuerdo de cambio de destino a favor de la universidad fue publicado el mismo día en el Periódico Oficial del Estado. 

Daniel Octavio Valdez Delgadillo, ex rector de la Universidad, informó durante la transmisión en vivo del pasado 8 de febrero del 2021 que el proyecto de remodelación estaba basado en tres estrategias: incrementar la matrícula en las sedes existentes, así como nueva oferta educativa y el proyecto de remodelación de este espacio.

Además contemplaba 20 aulas de clase para 40 alumnos cada una; dos salas audiovisuales y una clínica de servicios odontológicos con acceso al público; una biblioteca con espacio de estudio, consulta, cubículos; laboratorios de cómputo; laboratorios especializados para radiología; áreas médicas incluyendo anfiteatro y cubículos de profesores para atención a los alumnos.


Captura de pantalla de la transmisión que se realizó el 8 de febrero donde se observa al ex rector de la UABC mostrando que en el proyecto inicial ya se tenía contemplada la rehabilitación del tercer piso del inmueble.

En un recorrido hecho por el reportero el 1 de junio, guiado por Verónica González Torres, jefa académica del CUES, fue posible constatar que las instalaciones están remodeladas conforme al diseño original, pero no están completamente acondicionadas para el uso de los alumnos.

La Jefa Académica del CUES dijo en entrevista que están en procesos de licitación para complementar con equipo los laboratorios.

“Si bien contamos con equipos en algunos laboratorios, aún falta terminar de adquirir, pero justo estamos en procesos de licitación, ya están corriendo, ya estamos haciendo las revisiones para que podamos en el mes de agosto o en julio (2023) terminemos de recibir equipos de laboratorio para que los alumnos puedan realizar de mejor manera sus prácticas académicas”, comentó. 


Aspecto de uno de los laboratorios en los que se requiere equipamiento y para lo cual invertirán 17 millones de pesos adicionales al presupuesto inicial. Foto: Joebeth Terríquez

Otra de las áreas que continúa incompleta es la biblioteca, para la que se consideró en el proyecto presentado por el ex rector, un espacio de estudio y consulta con escritorios y sillas, además de cubículos. 

El área de la biblioteca donde aún no cuentan con el acervo bibliográfico, además de equipo para el estudio. Foto: Joebeth Terríquez

La biblioteca tampoco tiene acervo bibliográfico físico para su consulta, en el caso de los libros que corresponden a las áreas de la salud específicamente, solamente tienen un acervo digital. La jefa académica aseguró que el material lo tendrán pronto, sin especificar alguna fecha para ello. 


La cafetería, ubicada en la planta baja del CUES, permanece cerrada por falta de equipo y personal para brindar el servicio a los alumnos. Foto: Joebeth Terríquez

La cafetería se encuentra cerrada debido a que carece del equipo necesario, y por lo tanto los alumnos compran los alimentos fuera del inmueble.

“También queda un poquito pendiente la atención psicológica, en la inauguración del edificio en el mes de octubre, el entonces rector mencionó los servicios a la comunidad la ubicación física del CUES es un área estratégica para poder estar dando atención no nada más a la sociedad en la parte académica, en la parte de la formación de alumnos, sino también retribuir a la sociedad en servicios de salud ahorita ya empezamos con servicios dentales pero vienen servicios psicológicos también”, adelantó Verónica González.

Agregó que la transición fue paulatina, iniciaron en un momento en que se conjugaron varias situaciones. 

“Sabemos del tránsito del inmueble del Gobierno del Estado a la universidad, obviamente la instalación, cómo estaban distribuidos los espacios, no eran los idóneos para poder atender de manera inmediata a alumnos y se hizo una remodelación”, dijo.

La jefa académica del CUES señaló que en agosto del 2021 fue cuando inició el periodo escolar para la primera generación del CUES, en la modalidad en línea, contando únicamente con 450 alumnos de primer semestre de los programas educativos de Médico, Cirujano Dentista y Licenciado en Enfermería provenientes de tres facultades distintas: la de Medicina y Psicología, la de Ciencias de la Salud y la Facultad de Odontología.

Aseguró que para la etapa de inicio de clases de forma mixta, en línea y presencial en abril tomaron en cuenta recomendaciones de Bomberos y Protección Civil para contemplar el aforo máximo que podían tener ante una eventualidad, dado que las obras de construcción todavía las estaban llevando a cabo. 

Fue hasta el periodo 2023, en el mes de febrero, cuando finalmente arrancaron las operaciones con todas las actividades de forma presencial, con un total de 48 grupos de alumnos, con actividades de lunes a viernes y grupos que trabajan los sábados ya directamente en el inmueble.

“Tardamos tres semestres en alcanzar el máximo de nuestra población estudiantil, actualmente nosotros contamos con un aproximado de mil 750 alumnos que transitan semanalmente por nuestras instalaciones; se ha cubierto la demanda o la oferta de matrícula que se tenía prevista de un inicio”, aseguró.

Aspecto del interior del CUES. Foto: Joebeth Terríquez

Estudiantes tienen que salir del CUES por falta de equipo

Una estudiante que cursó el primer semestre en el programa de Medicina, que fue entrevistada vía telefónica y solicitó el anonimato por miedo a represalias, señaló que las instalaciones del centro incumplen con las condiciones para el desarrollo educativo y mencionó que, por ejemplo, los laboratorios carecen de equipo y por ese motivo nunca realizó prácticas ahí. 

“Nunca tuvimos una clase de laboratorio ahí por falta de material”. 

Detalló que cada ocasión que tenían clase de laboratorio los mandaban para el Campus Tijuana, que es la sede central de la universidad en la ciudad, por lo tanto tenían que desplazarse del CUES hacia el otro campus. 

“Eso significaba un problema por el transporte o el tiempo, porque tenía que ser muy rápido todo; sí nos molestamos, hasta le pedíamos al maestro que nos diera tiempo extra para poder llegar, y todavía después había que regresar al CUES a terminar otras tareas o continuar con otras materias”, dijo.

La estudiante también comentó que las instalaciones carecían de equipo de cómputo al momento de tener que realizar sus exámenes, por problemas con la distribución del internet.

“El internet o no funciona o no sabemos qué pasa, o no hay equipo suficiente como computadoras, porque al momento de tener que hacer los exámenes nos teníamos que ir a otros lugares fuera del CUES; me parece que no es nada profesional y me ha afectado porque no tenemos el lugar adecuado”, manifestó.

A todo ello, la alumna sumó que batallan con el transporte público, pues al estar ubicado en una zona de mucho flujo no hay rutas destinadas para esa zona que les facilite el acceso, además de no tener espacios suficientes en la biblioteca para estudiar, falta la cafetería, lo que implica salir de las instalaciones para comprar los alimentos. 

Insertar VIDEO: https://www.youtube.com/watch?v=3rx4KAek3Fk&feature=youtu.be

Rectoría universitaria reconoce cambios al proyecto inicial 

Luis Enrique Palafox Maestre, actual rector de la UABC, contestó vía correo electrónico que el sobrecosto en las obras de remodelación y rehabilitación del CUES, fue debido a que “en la proyección inicial de costos de remodelación del edificio se contemplaron únicamente los espacios existentes en los dos niveles construidos. Sin embargo, durante la elaboración del proyecto se determinó que la necesidad de espacios era mayor, por lo que se realizó una revisión estructural del edificio y se identificó que desde su origen se tenía previsto un tercer nivel”.

De ese modo, agregó, fue que la institución “determinó invertir en la construcción de un tercer piso, a fin de contar con más área útil para espacios académicos (un 50 por ciento más de lo disponible originalmente). Dicha ampliación significó un incremento de 68 millones sobre el estimado original”.

El rector explicó que, además de esto, por recomendación de las autoridades municipales y tras una revisión por parte de Protección Civil, debido al cambio de uso del edificio, era necesario contar con más salidas de emergencia, lo que les llevó a que “en el proyecto se considerarán cuatro escaleras de emergencia, de las cuales dos fueron requeridas para el arranque de operaciones y dos quedaron proyectadas para crecimiento futuro”. 

A ello le sumó que, una vez que tuvieron el acceso total a los espacios e instalaciones del edificio, “se identificó que las instalaciones eléctricas, aire acondicionado, red de voz y datos, eran ya obsoletas y se requería una renovación total, con el consecuente costo que eso implicaba”.

Cuestionado sobre el por qué el gasto en la rehabilitación y equipamiento sigue incrementando a la fecha, Palafox Maestre consideró que “es necesario precisar que el CUES fue puesto en funcionamiento antes de enero de 2023. Es decir, antes de que iniciara la presente gestión rectoral, a la que le correspondió dar seguimiento a los procesos de licitación que ya estaban en marcha y eran conocidos.

También señaló que hubo un incremento generalizado en el costo de los materiales, equipo y mano de obra por la pandemia. 

El rector también expuso que “entre la modificación al proyecto inicial, con la construcción de un tercer nivel, la rehabilitación de espacios, la sustitución total de aire acondicionado y red de voz y datos, además de la construcción de escaleras de emergencia y equipamiento, la inversión total ha sido de algo más de 287 millones de pesos, que han sido muy bien invertidos, pues gracias a esas instalaciones ha sido posible que más aspirantes del área de ciencias de la salud puedan ingresar a la UABC”.

Sobre el desabasto en equipamiento en áreas como los laboratorios y la biblioteca, el rector aceptó que “ha sido generalizado”, sin embargo, explicó que las licitaciones “han avanzado lentas precisamente por eso, y está en proceso una por 21 millones (que forman parte del total ya mencionado), que incluye acervo bibliográfico, y equipo de laboratorios”, del cual hace unos días recibieron tres equipos denominados “Anatomage”, que se utilizan en lugar de las prácticas de anatomía con cadáveres. Cada uno de ellos con un costo de 2.13 millones de pesos.

A propósito de los señalamientos de los alumnos sobre las ineficiencias al interior del inmueble el rector explicó que en cuanto al internet, desde octubre de 2022 terminaron de instalar el equipamiento y a partir del mes de marzo de 2023 “se dio por concluido el proceso de instalación y configuración del servicio de Internet, que tiene cobertura total en los tres niveles del edificio”.

Finalmente se le cuestionó para cuándo quedarían las instalaciones completamente habilitadas con el equipo que se requiere y aseguró que “se espera que en el transcurso de este año quede al 100%, dado que el presupuesto está asignado y están en proceso las licitaciones para equipo médico y de laboratorio”. 

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