Se sale de control vacunación anti-Covid por desinformación
Hugo Hernández
ALTAMIRA, Tam. – Eran las 10 de la mañana y las instalaciones del Cbtis 105 estaban llenas, enormes filas se formaron y es que personas de la tercera edad arribaron desde muy temprana hora para aplicarse la vacuna anti-Covid, no sólo de Altamira, sino de Tampico y Ciudad Madero, quienes no estaban programados, generando así malestar e inconformidad; Estado otorga cubrebocas con logotipo oficial, café y pan.
Algunos, abordo de carros y camionetas de lujo provenientes de Tampico y sin importar que otros adultos mayores contaran con un registro previo, exigían entrar y aplicarse la dosis, por lo que personal responsable tuvo que permitir el ingreso para evitar problemas.
La situación fue denunciada por Evelia Flores, quien llegó a las 6 de la mañana y contó con el número 180, pero, después de las 7 de la mañana, arribaron personas de otros municipios sin contar con el registro emitido por las autoridades federales.
A lo largo de la calle Altamira y boulevard Allende, se observaron las filas, algunos de los que buscan el biológico llegaron con sillas y hasta cobijas para aguantar la espera, y protegerse del frío que llegó a los 12 grados.
“Tengo que esperar que están del uno al cien y ya no quieren respetar los números, tengo que volver a hacer cola a pesar de que tengo mi número. A mí me hablaron para que me presentará, me dijeron que acá, es necesario que pongan orden”, manifestó.
Tras el incidente, Fabiola Torres, servidora de la nación, recalcó que es necesario que los abuelitos estén registrados y esperan la llamada para citarlos en alguno de los 19 puntos de vacunación distribuidos en la zona de Altamira.
“Se corre la voz y todos están aquí, ya les dijimos que por las inclemencias del tiempo no podemos estar así y además se necesita de sana distancia, a muchos les tomamos los datos para darles una cita”, añadió.
Durante el primer día se aplicaron 800 vacunas en la preparatoria y se prevén que sea el mismo número para este jueves, acción que concluirá el próximo sábado, ya que las dosis tienen una vigencia de cinco días.
Personal de la Guardia Nacional aplicó un dispositivo de seguridad para evitar cualquier tipo de riesgo a los abuelitos.
En el desarrollo de la vacunación, personal del Gobierno del Estado proporcionaba entre los asistentes cubrebocas con logotipo oficial, además de café y pan.
